En el trabajo no existe perfección absoluta. Así como se desarrollan buenas prácticas para laborar, también se desarrollan malos hábitos que perjudican el trabajo. Y si bien estos últimos no se suelen adoptar con malas intenciones, esto le pasa a la mayoría de personas.
Todos tenemos derecho a equivocarnos. Pero también a reconocer nuestros errores, porque de ellos aprenderemos y podremos seguir un camino que se asimile a la perfección.
Si en algún momento decides emprender y quieres lograr el éxito con ello, es preciso que corrijas los malos hábitos que te presentaremos a continuación.
¿Cuáles son esos malos hábitos?
Según el portal Dinero en Imagen, estos son los 10 malos hábitos más comunes:
- Trabajar con distracciones que impidan hacer las labores adecuadamente. Por ejemplo, utilizar el celular o escuchar música. (Leer: ¿Cómo evitar las distracciones en el trabajo?)
- No planificar adecuadamente. Si no se planifica las tareas asignadas en el trabajo, una de las consecuencia es entregar todo hasta la fecha límite que se dispone.
- No ser respetuoso. Una cosa es tener una relación profesional, y otra es caer en lo informal con los jefes o los compañeros de trabajo. El respeto debe primar en una relación de trabajo, porque además se evita los problemas que involucren ‘sentimientos’ entre el equipo de trabajo.
- Ser impuntual o ir a trabajar. La responsabilidad es primero ante todo.
- Falta de adaptación o discrepar constantemente con el equipo de trabajo. Uno de los principios básicos de trabajar en grupo es respetar las decisiones de los demás. Es importante pensar en el producto final en vez de los intereses individuales.
- No descansar o no tomarse pausas entre tareas.
- Querer agradar a todos. Ya lo mencionamos en el punto 3: en el trabajo se requiere de una relación profesional en vez de una afectiva.
- Utilizar facebook, twitter, skype, u otras redes sociales en el tiempo del trabajo.
- Hablar mal de la empresa o de los compañeros.
- Comer en horas de trabajo. Para eso el trabajo dispone de un horario determinado para hacerlo.